Inicio > Revista Gerencia de Riesgos y Seguros > Artículos > Infraestructuras viales y renovables: dinamizadoras de la inversión en América Latina
infraestructuras viales y renovables en america latina

Infraestructuras viales y renovables: dinamizadoras de la inversión en América Latina

Los numerosos planes de inversión en infraestructuras viales y del sector energético, auguran nuevas oportunidades de crecimiento a la región latinoamericana. Hacemos un breve repaso del punto de partida y algunos de los proyectos más destacados que se están llevando a cabo.

Las grandes infraestructuras son un activo imprescindible para el desarrollo económico de una región, tanto por el aspecto dinamizador de los proyectos como por la mejora estructural que supone su consecución. Tras el impacto de la pandemia en América Latina, y la paulatina recuperación de la actividad, los países están centrados en la necesaria mejora de sus redes viales y el impulso de las energías renovables, que están permitiendo la consolidación de potenciales inversiones en el sector de infraestructura.

Colombia

Según un reciente informe, respaldado por el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), el país ofrece $35 billones en oportunidades de inversión en infraestructura, que se repartirán en nueve áreas, entre ellas: transporte, desarrollo urbano, infraestructura social, saneamiento, agua y energía. En su tránsito a las energías limpias, Colombia cuenta con numerosos proyectos distribuidos por el territorio para la generación eléctrica en plantas solares, eólicas, hidroeléctricas y biomasa. En 2019, dos subastas históricas de fuentes renovables no convencionales permitieron dar un salto histórico en la hoja de ruta hacia la descarbonización, que derivaron en 14 planes, dando un importante protagonismo a la región de Guajira. El objetivo es que, para el 2022, aumente 50 veces la capacidad instalada de generación de energía solar y eólica en el país, logrando así para el 2030 una reducción de hasta nueve millones de toneladas de CO2.

Respecto a la estructura vial, Colombia cuenta con una red de carreteras de 206.627 km que se desarrollan a lo largo de su accidentada geografía.  En las últimas décadas la infraestructura de transporte es, según un análisis del Banco de Desarrollo de América Latina, limitada en relación con la economía y con un déficit muy acentuado en infraestructura -vial y ferroviaria- por habitante, por lo que requiere de una importante transformación. Si bien las inversiones en transporte vial han aumentado considerablemente en los últimos años, sobre todo en el ámbito carretero, donde superan el 1,5% del PIB, el país necesitará de un esfuerzo para seguir creciendo, ya que el tránsito vehicular aumentará según la organización un 3,2% al año. Los proyectos por cubrir como prioritarios en el ámbito de carreteras serían los destinados a mejorar las condiciones de las rutas pavimentadas y comunicaciones de la zona central con las costas, y en el ferroviario la construcción o rehabilitación de tramos hacia los puertos del Atlántico.

Argentina

La región cuenta con una red de carreteras distribuida en tres niveles: la ruta troncal, bajo gestión nacional; la secundaria, bajo gestión de provincias y la terciaria, dirigida desde la municipalidad. Como indica un informe del sector realizado por el CAF, debido a las características políticas del país la red nacional ha disminuido en los últimos 50 años, aunque los niveles de pavimentación de la red nacional son elevados -92%-. Respecto a la red ferroviaria, el país cuenta con una extensa infraestructura que supera los 18.900 km, con más de 10.500 km inactivos, entre tramos no utilizados -pero potencialmente recuperables- y abandonados.

Las inversiones en transporte en la actualidad no superan el 0,5% del PIB, y un 0,07% en ferrocarriles, lo que ha derivado en un estancamiento de su desarrollo. Aunque los análisis de cobertura son positivos, el esfuerzo en este caso debería estar dirigido a los más de 600.000km de la red que están sin pavimentar, así como en la escasez de redes de alta capacidad -autovías y autopistas-. De acuerdo con las estimaciones del CAF, la región deberá al menos duplicar sus inversiones en infraestructura en los próximos 20 años, además de impulsar el presupuesto anual destinado a mantenimiento.

En el sector energético, el país cuenta con un gran potencial en el ámbito de las renovables, debido a sus destacados recursos naturales para la generación solar y eólica. Desde el gobierno se está materializando el apoyo al crecimiento sostenido de su matriz energética a partir de proyectos: durante los meses de julio y agosto de 2021, se habilitaron cinco nuevos planes de generación en las provincias de Buenos Aires (dos de biogás), Córdoba (dos PAH) y San Juan (un parque eólico), que incorporaron en conjunto 103,22 MW de potencia instalada. En los dos primeros trimestres del año se habilitaron 10 y 5 proyectos -respectivamente-, que incorporaron 569,84MW de potencia instalada.

Brasil

El sector energético brasileño se caracteriza por tener una importante matriz renovable (cerca del 50% en 2019), siendo la energía hidroeléctrica la principal fuente de la región. Los datos prepandemia son, como indica un reciente informe del ICEX, esclarecedores: el país invirtió un total de 5.450 millones de euros en 2019, lo que supuso un aumento del 74% respecto al año anterior. Si bien las subastas de energía del país se vieron interrumpidas con la llegada del Covid-19, los proyectos se retomaron en verano de 2021, con las centrales fotovoltaicas como protagonistas. La Agencia Nacional de Energía Eléctrica (ANEEL) cerró el mes de septiembre con 4.882,88 MW en plantas de generación de energía eléctrica liberadas para comercializar, anticipando en más de tres meses las previsiones de 4.790,4 MW establecidas a principios de año.

Respecto a la red de carreteras, el país cuenta con 1,5 millones de kilómetros, con una densidad vial de 185 km/1.000 km2 según un informe del CAF que incide asimismo también que solo el 15% de la red total está pavimentada. La red ferroviaria asimismo tiene una considerable extensión, dedicando 29.075 km al transporte de cargas. Las inversiones en ambas infraestructuras de transporte representaron entre 2003 y 2015 un 0,58% del PIB en promedio. Respecto a las oportunidades de futuro, las concesiones se concentran en la operación de mejoras y mantenimiento de carreteras, lo que difiere de otras regiones, donde se tiende a construir y explotar nuevas redes. Según el reporte, si el país quisiera cerrar la brecha de infraestructuras con países de grandes ingresos del mundo, las inversiones en esta materia deberían alcanzar el 4,1% del PIB en 2040 (9-10 veces la inversión actual).

México

El segundo país más poblado de América Latina ha ido desarrollando sus redes viales en paralelo a su crecimiento económico, y tanto las carreteras como los ferrocarriles son de los que ostentan una mejor calidad dentro de la región (el 40% de sus vías están pavimentadas, frente a la media regional de 19%). Por su parte, los ferrocarriles se caracterizan por la descentralización de su región y el intercambio con Estados Unidos -casi en exclusiva para el transporte de carga-. Hay que tener en cuenta que, dada su posición geográfica, México es un importante punto estratégico con gran potencial logístico y comercial. Las inversiones en este frente fueron de promedio un 0,6% del PIB, liderado aún por el sector público. Sin embargo, como señalan desde el CAF, el gobierno mexicano acaba de lazar el Acuerdo Nacional de Inversión en Infraestructura del Sector Privado, que abarca una inversión de USD 45.000 millones hasta el año 2024, de los cuales USD 15.000 irán destinados al sector transportes. Por su parte, las instituciones se han comprometido a desarrollar un entorno institucional y macroeconómico estable. Dentro de los proyectos destacan la Autopista Interserrana, el puente internacional en Nuevo Laredo y el corredor ferroviario García-aeropuerto de Monterrey.

En el ámbito energético, la región cuenta con más de 300 proyectos eólicos y solares, con una importante carga de inversión, pero en la actualidad el sector está a la espera de una iniciativa presentada por el presidente López Obrador que supondría un control absoluto de la Comisión Federal de Electricidad, y que podría impactar en la matriz renovable -solar y eólica-, gestionada en un 99% por inversión privada.

Chile

País ejemplar en el esfuerzo común por una transición a energías renovables, Chile ha incrementado su apuesta por las fuentes no convencionales en la última década, alcanzando un importante hito en 2020, cuando supusieron un 46,5% de la generación total. Su intención es alcanzar la neutralidad de carbono en 2050. De cara a 2022, Chile cuenta con un total de 23 proyectos listos para ponerse en marcha, entre parques solares como Andes II o Elena, y centros eólicos como Caman o Llanos del Viento.

El sector transportes es esencial para el desarrollo económico de la región, ya que explica el 7% del PIB -principalmente a través de sus carreteras-. La red vial chilena tiene más de 85.000 km, con un alto índice de pavimentación de los caminos nacionales, 82%, un porcentaje que desciende al analizar los caminos regionales y vecinales. Apenas el 24% de la red total se halla cubierta, por lo que en el país hay 1,1 km pavimentado por cada mil habitantes, un valor señalado por el CAF como muy bajo. Respecto a la red ferroviaria, su estructura principal cuenta con un eje norte-sur de unos 2.500 kilómetros del que se desprenden ramales, además de cinco conexiones internacionales. Su centro logístico se encuentra en la cercanía de los puertos. El país se encuentra en estos momentos en plena búsqueda de inversión para mejorar el transporte marítimo, lo que implica también la optimización de las interconexiones terrestres.

donwload pdf
Honduras: perspectivas económicas y comerciales

Honduras: perspectivas económicas y comerciales

Honduras se encuentra inmersa en un plan de acción para promover un crecimiento económico sostenible que impacte positivamente en sus compromisos con la ciudadanía, la mejora de infraestructuras estratégicas y el aumento de resiliencia al cambio climático. El...

leer más